Actición® 15 – Coherenciómetro

¿Qué ocurre cuando nuestras acciones no se corresponden con los planes de acción que nos hemos propuesto hacer?
¿Por qué hay personas que se siente muy mal cuando incumplen sus planes de acción y otras a las que nos les afecta en absoluto?
La respuesta tiene que ver con los niveles de coherencia que ejercitamos las personas al tomar decisiones y con los mecanismos o que utilizamos para disminuir el malestar psicológico que nos produce la tensión entre lo que realmente pensamos y lo que hacemos.
Es coherente toda persona que actúa de acuerdo con sus creencias, valores y sentimientos. Por tanto, la coherencia no es un valor personal, es un estado que sitúa a las persona con respecto al nivel de concordancia entre sus actos, las decisiones que han tomado y sus creencias, actitudes o sentimientos. Es, en definitiva, un estado producto de nuestras decisiones.
Las consecuencias psicológicas de actuar inconsistentemente o incoherentemente, son distintas según la importancia que concedemos a las situaciones en las que se manifiesta y a la importancia que le demos a los valores que con nuestras decisiones ponemos en juego.
Por ejemplo, una persona sincera que valore la amistad y las relaciones familiares, se sentirá mucho peor cuando engaña a su pareja, al ocultarle una relación amorosa, que cuando miente a su amigo poniendo una excusa falsa para no asistir a una fiesta.
Una persona que tenga un elevado sentido del deber se sentirá mucho peor cuando incumpla un compromiso adquirido con un tercero, que otra que no tenga ese elevado sentido del deber. Un estudiante comprometido se sentirá mal cuando haya suspendido un examen por falta de dedicación.
Y es importante saber que la incoherencia conlleva efectos físicos que pueden afectar a nuestra salud, en algunos casos pueden tener como consecuencia elevados niveles de ansiedad y de estrés.
Pero, quizás, lo más importante es cómo las personas disminuimos ese malestar psicológico que nos producen las actuaciones incoherentes. Para ello, utilizamos mecanismos de defensa que fueron descubiertos en 1957 por el psicólogo social León Festinger. Mediante su teoría de la disonancia cognitiva identificó que las personas tenemos mecanismos para corregir nuestras incoherencias. Yo creo que en la mayoría de los casos, esos mecanismos, no son otra cosa que auto-justificaciones. Excusas que nos damos a nosotros mismos para eliminar el malestar psicológico que nos produce la inconsistencia entre nuestros actos y nuestros valores.
Según esta teoría siempre que decidimos hacer algo incompatible con nuestras creencias más profundas, sentimientos o valores, se crea en nosotros un estado de disonancia cognitiva (incoherencia), una tensión entre lo que pensamos y lo que estamos haciendo o hemos hecho. Cuando esta tensión ya nos ha incomodado lo suficiente surge en nosotros un estímulo para reducirla de diversas maneras:
• Podemos cambiar nuestra forma de pensar respecto a la decisión
• Tratar de cambiar lo que los demás piensan del tema para que puedan apoyar nuestra decisión.
• Podemos cambiar algún aspecto de nuestro comportamiento de forma que nuestra decisión se adecúe más a nuestra forma de pensar.
• Otra fórmula es reducir esa tensión o estado desagradable recurriendo a ayudas externas como cierto tipo de medicamentos tranquilizantes o drogas como alcohol…, es decir, actuando sobre los aspectos fisiológicos característicos de la disonancia.
En definitiva, tratamos de disminuir la incoherencia que se ha manifestado por actuar de forma distinta a como pensamos que debíamos haber actuado, cambiando una u otra actitud o incorporando ayudas externas.
Así que para no necesitar excusas ni tener que recurrir a ayudas externas, podemos plantearnos incrementar el marcador de nuestro coherenciómetro mediante esta Actición®. Solo tienes que responder a estas preguntas y corregir el aspecto que esté impidiendo conseguir los máximos niveles de coherencia.

En este video, por si te interesa, tienes una breve explicación de uno de los experimentos que llevó a cabo León Festinger y su equipo para evidenciar empíricamente su teoría de la disonancia cognitiva.

One comment

  1. ISABEL dice:

    debe insistir mas en este tema

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Featuring Recent Posts WordPress Widget development by YD